A solo un día del debut del token LUNA bifurcado, este ha tenido una caída del 70%. Esto ante la última interacción de la cadena de bloques Terra (Terra 2.0), hablamos de un comienzo muy difícil con su token nativo LUNA que cayó considerablemente luego del debut de la cadena el sábado.
LUNA, el token «remodelado» del mismo nombre, cayó más del 70% el domingo luego de una rápida liquidación después de cotizar en los intercambios de cifrado Bybit, KuCoin, Gate.io y Huobi. El token se vio por última vez cambiando de manos por alrededor de $ 5,69, luego de un pico de 24 horas de $ 19,54. El nuevo LUNA había cotizado inicialmente en Bybit por alrededor de $ 3,63, según muestran los datos del proveedor CoinMarketCap.
Por otro lado, el volumen de negociación de LUNA durante un período de 36 horas también cayó junto con su precio, registrando una caída del 64% en la actividad desde un pico de alrededor de $393,4 millones a alrededor de $145,3 millones. Es así que este colapso sin lugar a dudas repercutió a todo el ecosistema criptográfico ante la desvinculación de la moneda estable algorítmica empezara a desvincularse con el dólar estadounidense.
Después de varios intentos fallidos de devolver UST a la paridad, el token LUNA original, vinculado a UST por diseño, también cayó un 99 % desde un máximo de 66,51 dólares el 9 de mayo a menos de un centavo tres días después. Tras un inminente fracaso y la desconfianza de muchas y muchos, Terraform Labs, el principal desarrollador del ecosistema Terra/LUNA, propuso dividir la cadena en un intento de calmar a los inversores enojados y restaurar la fe en su marca.
Es así que tras una votación de una semana, la semana pasada, dio como resultado que el 65% de los titulares de LUNA optaran por bifurcar la cadena maltratada. Un Terra Classic renombrado junto con su activo nativo Luna Classic (LUNC) se han mantenido como la cadena y el token originales, mientras que la iteración más reciente toma la forma de la antigua marca Terra y LUNA.
Con esto, la nueva cadena promete ser una red «totalmente propiedad de la comunidad» con varias direcciones, vinculadas al proyecto, que se eliminaron de su lista blanca de airdrop. Sin embargo la nueva cara no da confianza todavía y muchos siguen enojados por la falta de claridad y compensación brindada a aquellos que perdieron cientos de miles e incluso millones de dólares en tokens.
