Este año ha sido de diversas incursiones por parte de la Unión Europea, desde la minería hasta la finanzas descentralizadas. Es así que un nuevo informe de DeFi muestra cómo diversos especialistas de la burocracia de Bruselas se encuentran analizando la Web3 y los activos digitales.
Como sabemos, la Unión Europea es pionera en muchas cosas si de regulación hablamos. Un claro ejemplo es el desarrollo de la legislación de protección de datos a través de GDPR (Reglamento General de Protección de Datos). Hoy, la Comisión Europea también pretender estar a la vanguardia de las reglas que podrían dar forma a un mundo financiero descentralizado.
Ante esto, el brazo ejecutivo de la UE reveló que probará una forma integrada de supervisión de DeFi (finanzas descentralizadas), que por ahora está principalmente no regulada por medio de un piloto.
“La adaptación del marco regulatorio de los servicios financieros de la UE a un entorno [descentralizado] requerirá un replanteamiento. Este año se lanzará un proyecto piloto sobre «supervisión integrada» para «beneficiarse de la transparencia de datos inherente en las cadenas de bloques públicas», reveló el informe.
Con esto, se buscaría conseguir una solución de alta tecnología en la que los supervisores «supervisan automáticamente el cumplimiento del marco regulatorio mediante la lectura de datos de transacciones de blockchain». Con esto no habría necesidad de que lo participantes del mercado «recopilen, verifiquen y entreguen activamente datos a las autoridades de supervisión», como es el caso en el sistema financiero ahora.
Es así que la propuesta se encuentra en medio de dos lados, el de una inminente oportunidad para a innovación y un riesgo altísimo que muchos ejecutivos han reconocido en DeFi.
