La pandemia nos ha dejado en evidencia a toda la población mundial sin importar la cultura, lo frágil que pueden llegar a hacer nuestros sistemas sociales como nuestros sistemas financieros. La pandemia nos dio la oportunidad de darnos cuenta cuales son las áreas de oportunidad y cuales son las áreas que hay que prestar especial atención. En la nota de hoy además de hablar sobre cómo estas dos áreas tan diferentes pero esencialmente conectadas, se relacionan y cómo una puede ayudar a la otra y viceversa. También hablaremos de cómo las Fintech están rompiendo la brecha de género.
La Economía y la Sociología
Ambas a pesar de provenir de rubros distintos ambas estudian lo mismo, el comportamiento de las sociedades; la diferencia es la finalidad de estudio que cada rama le da.
La economía por su parte estudia las actividades humanas con respecto a las necesidades tanto individuales y con especial enfoque, las necesidades colectivas, es decir las que encontramos en un conjunto social.
Por otro lado, la sociología estudia y analiza las reacciones y comportamientos sociales ante acontecimientos que impactan directamente a las sociedades y/o a la sociedad mundial.
La relación entre ambas comienza cuando la sociología estudia las necesidades de los individuos. El claro ejemplo es la pandemia, a inicios de esta, hubo pánico colectivo y mucha gente compraba papel higiénico. Los deseos y necesidades de los individuos que la sociología estudia, los llena la economía. Ejemplo, la ropa; para cierto grupo de personas es una necesidad y para otro grupo un deseo.
Fintech y la Equidad y Género
Ahora bien, hablamos de cómo las nuevas tecnologías y su comportamiento financiero, agregando la pandemia, han beneficiado al sector femenino y como estamos cambiando el panorama tradicional.
Tradicionalmente y en muchas actualidades; las mujeres contamos con menos empleos formales, además en muchos casos existen pausas laborales por razones de maternidad y crianza de hijos, obtenemos menores ingresos y menos activos de propiedad, estamos expuestas a los problemas de seguridad y de movilidad. Por otro lado, al tener mucha carga tanto laboral como del hogar, el tiempo es limitado es por ello que no nos alcanza para ir a los bancos (hablando nada más de temas financieros). Todo esto llega a hacer un mayor problema cuando el contexto de la mujer es en zonas rurales.
Afortunadamente hoy en día las Fintech cada vez más están apoyando al sector femenino, ya que se están utilizando para incrementar la conectividad e incrementar el acceso a las mujeres en el sector financiero. Un ejemplo, de las instituciones financieras que están apoyando a las mujeres es la fintech brasileña llamada “Elasbank”. El objetivo de esta fintech es crear productos de equidad y género financiero adaptados a las mujeres. Su ecosistema de operación es de Open Bank implementando un servicio de operación para que las mujeres puedan invertir.
Relevancia
Además de proporcionar un mejor estilo y calidad de vida a las mujeres, sobre todo a las que están más expuestas a la marginación; beneficia a toda la nación. Al ser las personas directas en el desarrollo y educación de los menores, ellos serían los primeros en beneficiarse, ya que recibirán una mejor calidad de vida. Esto tiene un efecto dominó, ya que a largo plazo los menores crecerán con una visión más amplia incrementando el valor de la nación, tanto económico como social. Por otro lado, según estudios del Instituto Global de Mckinsey, podría elevar a más del doble el Producto Interno Bruto; hablando solo de México.
Contexto en México
Se ha demostrado que somos el país con la bancarización (término al que se refiere al nivel y grado de uso de servicios bancarios y productos afines al sector) más bajo de Latinoamérica, en comparación con los países más desarrollados y sólo el 33% de esta población son mujeres. Esto representa un nicho enorme en el mercado, del cual muchas mujeres ya se han dado cuenta. Esto se afirma con el estudio realizado por Finnovista y el Banco Interamericano de Desarrollo, demostró que 1 de cada 3 fintech está encabezada por una mujer. Tal es el ejemplo de la Fintech llamada “Jefa”; la cual tiene una función similar a la fintech brasileña.
Es cierto que aún queda un largo camino por recorrer, pero este camino ya comenzó a construirse y es muy importante seguir agregando cada vez más. Es importante atender a la necesidad que hoy en día presentamos; la cual es la educación financiera femenina en todos los sectores económicos y en las distintas edades. Solo con esa inclusión la mujer poco a poco tomará un rol protagónico y empoderante para otras mujeres en las empresas y en la industria laboral en general.
