Los últimos dos días no ha dejado de sonar la caída de Evergrande, el segundo mayor promotor inmobiliario en ventas del gigante asiático. Si bien, la caída de esta empresa ha provocado una merma en la bolsas del mundo el pasado lunes. Numerosos analistas apuntan de que esto podría tratarse del «Lehman Brothers» de lo que actualmente se trataría de la segunda economía más grande del mundo. Ante esto, el gobierno chino se encuentra en la encrucijada de tomar una decisión: si mantener a flote una de los principales constructores del país o simplemente poner en riesgo a más de 1.300 desarrollos inmobiliarios en 280 ciudades de China al dejar que desaparezca.
¿Qué es Evergrande?
Es la segunda compañía de desarrolladores inmobiliarios más grandes de China. Siendo parte de Global 500, como una de las empresas más grandes del mundo por ingresos. Actualmente cotiza en Hong Kong y cuenta con su sede en la ciudad de Shenzhen, en sur del gigante asiático y emplea a más de 200.000 personas en el país y tiene que ver indirectamente en el empleo de más de 3,8 millones de puestos de trabajo cada año.
La compañía fue fundad por quien alguna vez llegó a ser el hombre más rico de China, Xu Jiayin o mejor conocido en su natal cantonés como Hui Ka Yan. Actualmente la compañía cuenta con el peso de tener 1.300 proyectos en más de 280 ciudades en China. De igual manera Evergrande ha incursionado en diversas industrias como la Automotriz, inmobiliaria, manufactura, propiedades, turismo, salud y consumo. Aunado a esto podemos agregar que en 2010 el grupo compró un equipo de fútbol conocido como el Guangzou Evergrande. Desde entonces el club ha construido lo que sería la academia de futbol más grande del mundo. Su estadio, con forma de flor de loto tuvo un costo de 1.700 millones de dólares y podrá albergar a 100.000 espectadores.
Es evidente que estamos ante una empresa diversificada y sustentada en diversas ramas, la pregunta aquí radica en un ¿qué pasó?
Como bien pudimos brevemente captar, la desmedida diversificación de la empresa conllevó un endeudamiento mortal para la salud financiera de la empresa. Hablamos de contar con más de $300.000 millones en pasivos. Ante esto, la empresa está empezando a tener problemas de liquidez ya que no alcanzaría para cumplir con sus deudas.
La analistas de Goldman Sachs, Mattie Bekink señaló que el grupo «se alejó mucho de su negocio principal, que es parte de cómo se metió en este lío». Sin embargo no todo gira en Evergrande pues la la misma Bekink señala que: «La historia de Evergrande es la historia de los desafíos profundos [y] estructurales de la economía de China relacionados con la deuda».
Esto se debe a que el año pasado, numerosas empresas estatales chinas no pudieron cumplir sus préstamos. Claro que esto sustenta el temor sobre la dependencia de China de las inversiones impulsadas por la deuda para respaldar el crecimiento.
Esto sin duda ha conllevado fuertes caídas en diversas bolsas del mundo. Sin duda Evergrande representa una cadena que alterará no sólo la economía china sino la mundial:
- Wall Street: los 11 sectores del S&P 500 bajaron, el energético siendo el más afectado.
- Industrial Dow Jones, cayó 1.78% para llegar 22,970 unidades.
- El índice NASDAQ Composite, de gran peso tecnológico cayó 2.19% a 14,713.90 puntos.
- Merval de Argentina, con una caída de 6.21%.
- DAX de Alemania bajó 2.31 por ciento.
Mercado Mexicano.
La bolsa mexicana no se libró de este efecto dominó. El principal índice de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), el IPC perdió 1.46% llegando a los 50,557.65 unidades y el FTSE.BIVA de la Bolsa Institucional de Valores (BIVA) perdió 1.45% a 1,042.31 enteros.
