En los últimos años, la inteligencia artificial (IA) ha emergido como una de las tecnologías más revolucionarias, transformando industrias y generando una demanda sin precedentes por recursos computacionales. En este contexto, la energía se ha convertido en un recurso fundamental, indispensable para soportar la creciente infraestructura que impulsa la IA. Un ejemplo destacado de esta tendencia es el acuerdo de $3.5 mil millones entre CoreWeave y Core Scientific, donde la energía y la capacidad de cómputo se posicionan como los pilares de esta nueva era tecnológica.
El Acuerdo Entre CoreWeave y Core Scientific
CoreWeave, un proveedor de servicios de computación en la nube, recientemente firmó un acuerdo monumental con Core Scientific, una de las empresas mineras de Bitcoin más grandes de América del Norte. Este acuerdo, valorado en $3.5 mil millones, implica que CoreWeave pagará $290 millones anuales durante 12 años para utilizar los centros de datos de Core Scientific en la ejecución de hardware relacionado con IA. Además, CoreWeave cubrirá todos los gastos de capital necesarios, lo que subraya la importancia de tener acceso a infraestructura energética adecuada para soportar la IA.
El Impacto en el Mercado de Valores
El impacto de este acuerdo no se limitó solo a las empresas involucradas. Las acciones de Core Scientific se duplicaron hasta alcanzar los $10 a principios de junio, lo que llevó a algunos observadores a considerar a la empresa como el nuevo «picks and shovels» del sector de la IA. Además, el 26 de junio, CoreWeave anunció un segundo contrato con Core Scientific, proyectado para generar $1.2 mil millones en ingresos en los próximos años, consolidando aún más la posición de ambas empresas en este nicho.
La Demanda de Energía en la Era de la IA
La creciente demanda de capacidad computacional de alto rendimiento, impulsada por aplicaciones de IA como ChatGPT, está colocando una prima en compañías como Core Scientific que tienen acceso a energía barata. La IA está elevando la demanda de energía, y es crucial contar con esta capacidad disponible de inmediato, dado que construir centros de datos desde cero puede tardar entre 3 y 5 años. Según el Lawrence Berkeley National Laboratory, los tiempos de espera actuales para conexiones a la red eléctrica pueden extenderse hasta seis años, lo que subraya la urgencia de contar con acceso a energía en estos momentos.
La Estrategia de Core Scientific
Adam Sullivan, CEO de Core Scientific, destacó la importancia de ejecutar correctamente las operaciones con la infraestructura energética actual. Sullivan afirmó que si logran ejecutar sus contratos de energía actuales, Core Scientific se convertiría en una de las 10 principales empresas de centros de datos en los Estados Unidos, albergando una parte significativa de la IA en el país durante los próximos años. La empresa ha trabajado en estrecha colaboración con Nvidia y otros socios para diseñar y operar los chips necesarios para estas tareas.
La Reacción del Mercado
Desde el anuncio del primer contrato con CoreWeave el 3 de junio, el valor de mercado agregado de 14 empresas mineras de Bitcoin en Estados Unidos aumentó un 22%, según un informe de JPMorgan. Este aumento contrasta con la caída del 12% en el valor de Bitcoin y el incremento del 4% en el S&P 500 durante el mismo período. Estos 14 mineros controlan aproximadamente 5 gigavatios de potencia y pueden destinar 3.6 gigavatios de esa capacidad para el cómputo de alto rendimiento.
El Futuro Energético de los Centros de Datos
Según el Instituto de Investigación de Energía Eléctrica, la demanda de energía por parte de los centros de datos podría aumentar hasta el 9% de la generación de energía de Estados Unidos para 2030, impulsada por el auge de la IA. Esto representaría más del doble del uso actual, lo que resalta la importancia de la energía en este nuevo panorama tecnológico.
Desafíos para los Mineros de Bitcoin
A pesar de la abundancia de energía, los mineros de Bitcoin enfrentan desafíos para redirigir su capacidad eléctrica hacia la IA. El CEO de Applied Digital, Wes Cummins, señala que encontrar grandes cantidades de energía en el corto plazo es extremadamente difícil, lo que convierte a los contratos de energía en un activo valioso para los mineros estadounidenses. Sin embargo, estos contratos de energía solo son valiosos si se complementan con otros elementos, como la conectividad de fibra óptica, que es crucial para el cómputo de alto rendimiento.
La Transición de los Mineros de Bitcoin hacia la IA
A pesar de las dificultades, varios mineros de Bitcoin han comenzado a adaptar sus operaciones para capitalizar la ola de la IA. IREN, anteriormente conocida como Iris Energy, fue una de las primeras empresas en reconocer esta oportunidad, y recientemente adquirió 816 GPUs Nvidia H100, los chips más potentes para IA en la actualidad. Empresas como Hut 8 también están invirtiendo en infraestructura relacionada con la IA, buscando alianzas estratégicas para aprovechar este creciente mercado.
La creciente importancia de la energía en el mundo de la inteligencia artificial es innegable. Acuerdos como el de CoreWeave y Core Scientific subrayan cómo la infraestructura energética y la capacidad de cómputo de alto rendimiento son ahora los pilares sobre los cuales se construye el futuro de la IA. A medida que la demanda de energía continúa aumentando, las empresas que puedan asegurar acceso a fuentes de energía confiables y económicas estarán en una posición privilegiada para liderar la próxima revolución tecnológica.
El desafío para los mineros de Bitcoin que buscan diversificar sus operaciones hacia la IA radica en la complejidad y el costo de las infraestructuras necesarias. Sin embargo, para aquellos que puedan superar estos obstáculos, las recompensas pueden ser significativas, proporcionando ingresos más estables y predecibles en comparación con la volatilidad del mercado de criptomonedas. En un mundo donde la energía se ha convertido en el nuevo tesoro, aquellos que puedan gestionarla y utilizarla eficazmente estarán en la cima de la próxima ola tecnológica.