La Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios y la Comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior votaron a favor de ampliar los requisitos en contras del blanqueo de capitales en el criptoespacio.
Ante esto, los embajadores de la Unión Europea acordaron un mandato en diciembre para negociar con el Parlamento Europeo una propuesta para ampliar el alcance de las reglas de transferencias de fondos con la finalidad de incluir ciertos criptoactivos.
Con esto, la propuesta toma una dirección de exigir a los proveedores de servicios criptográficos (exchanges), recopilar y compartir información sobre el remitente y el beneficiario de estas transferencias de activos, una práctica que los proveedores de servicios de pago realizan actualmente para las transferencias electrónicas.
Por consiguiente, tomando en cuenta estas medidas, los legisladores esperan garantizar la trazabilidad de las transferencias entre proveedores servicios criptográficos y las llamadas «carteras no alojadas» para poder identificar mejor las posibles transacciones sospechosas y potencialmente bloquearlas.
Una billetera no alojada es un término utilizado por el Grupo de Acción Financiera Internacional y la Red de Ejecución de Delitos Financieros y adoptado por otros organismos gubernamentales y reguladores. Significa que una persona mantiene sus propias claves privadas, conocidas en la industria de la criptografía como «billetera» o «billetera autohospedada» para delinear entre los activos controlados por una institución financiera que actúa como custodio y un individuo.
De igual manera se impondrán requisitos para verificar su la información sobre el pagador o el beneficiario es precisa en las transferencias de criptomonedas que superen los 1.000 euros.
Ante esto, Paul Grewal, directo legal de Coinbase escribió que los «malos hechos hacen malas leyes», haciendo alusión a esta propia votación y agregó lo siguiente:
«Si se adopta», escribió, «esta revisión desataría un régimen de vigilancia completo en intercambios como Coinbase, sofocaría la innovación y socavaría las billeteras autohospedadas que las personas usan para proteger de forma segura sus activos digitales».
