Fabio Panetta, miembro de la junta del BCE desde el 2020, pide una mayor regulación de clase de activos emergentes para proteger a los inversores de diversas estafas como lo son los esquemas Ponzis. Estos se han suscitado bajo esquemas de minería fraudulentos y videojuegos Play to Earn.
Panetta califica al entrono blockchain como un «frenesí sin ley», y agrega que “los criptoevangelistas prometen el cielo en la tierra, utilizando una narrativa ilusoria de precios de criptoactivos en constante aumento para mantener las entradas y, por lo tanto, el impulso que alimenta la criptoburbuja”. Estas palabras fueron pronunciadas por el mismo Panetta tras su discurso en la Universidad de Columbia en Nueva York el pasado lunes. “Pero las apariencias engañan. El sueño de Satoshi Nakamoto de crear dinero confiable sigue siendo solo eso: un sueño”.
Por otro lado Panetta resalta que la industria está teniendo un parecido «sorprendente» con la crisis de las hipotecas de alto riesgo del año 2008 que desencadenó la mayor recesión económica de Estados Unidos desde la Grande Depresión.
De igual manera, otros funcionarios de BCE han expresado su preocupación por el exponencial crecimiento que ha tenido la industria en ls últimos años. El vicepresidente del BCE, Luis de Guindos dijo que la volatilidad de la industria criptográfica todavía no ha tenido un impacto en la estabilidad financiera.
“A este ritmo de crecimiento, tenemos que prestarle atención, especialmente en relación con temas como el financiamiento del terrorismo y la evasión de impuestos”.
Luis de Guindos
Isabel Schnabel, otro miembro de la junta, calificó previamente a bitcoin como «especulativo», y agregó que su alta volatilidad lo hace «inadecuado como depósito de valor». En medio del llamado a una mayor supervisión, el BCE ha estado investigando el caso de uso de una moneda digital del banco central, dijo Panetta al Parlamento Europeo en marzo.
Por último, señalan que una moneda electrónica emitida por el gobierno podría revolucionar los sistemas de pago, pero existen preocupaciones sobre la privacidad y la seguridad.
“Emitir una moneda digital del banco central ayudaría a mantener la autonomía de los sistemas de pago nacionales y el uso internacional de una moneda en un mundo digital”.
CBE
